A la hora de solicitar préstamos a una entidad como Préstamos Invest & Loan, es de especial interés conocer qué es el Índice de Precios al Consumo (IPC). Se trata de un indicador que se usa para mediar la evolución de los precios de los bienes y servicios que consumen los hogares. Del mismo modo que la inflación, permite evaluar la variación del coste de vida en una economía.
¿Qué es el IPC?
El IPC es una medida estadística de la evolución de los precios de una cesta de la compra representativa de las familias en España. Los bancos centrales utilizan este indicador para fijar la política monetaria, por lo que tiene una gran influencia en los créditos y la financiación.
¿Cómo se fija el Índice de Precios de Consumo?
En España, es el Instituto Nacional de Estadística (INE) el encargado de realizar el cálculo del IPC. Lo hace a partir de una cesta que incluye 955 productos de distintas categorías: alimentación y bebidas no alcohólicas, bebidas alcohólicas y tabaco, vivienda, vestido y calzado, menaje, transporte, medicina, comunicaciones, hoteles, ocio y cultura, enseñanza, cafés y restaurantes y otros bienes y servicios. Se revisa de forma periódica, añadiendo nuevos artículos cuyo consumo empieza a ser significativo, o excluir aquellos que han dejado de serlo.
La selección de productos que forman parte de la cesta de la compra del IPC, se realiza según el peso que estos tienen en el gasto que hacen las familias. En la actualidad, la categoría de alimentos y bebidas no alcohólicas supone el 22,6 % del total de la cesta.
Los precios se recogen en 177 municipios (52 capitales de provincia y 125 localidades no capitales de las que 31 tienen una población de menos de 50 000 habitantes). Para recoger los 220 000 precios, se visitan unos 29 000 establecimientos.
¿Qué tipos de IPC hay?
Este indicador se difunde todos los meses y se presenta comparándolo con el dato del mes anterior y del mismo mes del año anterior. Se diferencian dos tipos de IPC.
Por un lado, el conocido como IPC subyacente. En aquel que se calcula sin tener en cuenta los precios de los alimentos no elaborados, como las frutas y las verduras, y los productos energéticos.
Y, por otro lado, el IPC armonizado. Es el que usa la Unión Europea (UE) para comprar la inflación en los distintos países miembros. En este caso, para su cálculo se utiliza una cesta de productos en común.

¿De qué manera nos puede afectar la actualización del IPC?
Cuando el IPC sube con respecto al mes o al año anterior, inmediatamente se produce una pérdida de poder adquisitivo por parte de las familias. La razón es que una subida del IPC se traduce en una inflación de los precios, lo que afecta inevitablemente a la renta de las familias. Esto podría dar lugar a una reducción del consumo, ya que la cesta de la compra se encarece.
A esto hay que sumar que la subida del IPC conlleva una pérdida de competitividad de cara a los mercados exteriores. Al aumentar los precios de los productos, para las empresas es más complicados venderlos al exterior.
En conclusión, la subida del IPC puede llevar a muchas familias a sufrir problemas de liquidez. Por ello, es muy importante conocer el IPC a la hora de pedir préstamos y planificar la economía familiar.
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